La historia del futbolín

Las máquinas recreativas en Lanzarote son un clásico en todo tipo de establecimientos. El motivo es que suponen una manera muy sencilla de dar vida a cualquier tipo de bar o de local, ya que alegran, animan e inundan de personas los diferentes espacios.

Sin embargo, no todas las máquinas recreativas en Lanzarote son iguales. Y es que por encima de todas destaca y destacará siempre la misma. Se trata del futbolín. Este entretenido juego es ya un clásico para muchas personas y muchos bares. Y aquí queremos explicarte su curiosa historia.

Para empezar, si rastreas buscando información sobre su origen, encontrarás diferentes versiones que no terminan de encajar las unas con las otras, ya que unos apuntan a Francia y otros a Alemania como países de origen de este juego. Sin embargo, parece confirmado que fue obra de un gallego, Alejandro Finisterre, quien lo elaboró en un hospital para entretener a los heridos por la Guerra Civil.

Finisterre era un buen conocedor del tenis de mesa y quiso hacer algo similar con el fútbol, es decir, jugarlo en un formato mucho más reducido, más intenso y en donde jugasen menos personas. De ahí aparece el primer futbolín.

Otra curiosidad de este juego es que apenas sufrió modificaciones. Nada más crearse se conservó su diseño original. El motivo es que resultó ser verdaderamente funcional y no tener errores, por lo que no hizo falta ni revisarlo ni modificarlo.

Por tanto, la principal curiosidad de la historia es el significado que hay detrás este juego, ya que fue creado para entretener a las personas en un momento muy bajo y muy difícil.

En Canarimatic contamos con una amplia gama de juegos recreativos y de diferentes modelos de máquinas para que puedas encontrar las que mejor vayan a encajar en tu local.